Mas alla de la tradicional semblanza sobre el arrebato de Yvain, el vocabulario de la locura impregna toda su historia, afectando a varios personajes y numerosas situaciones. La insistencia de esta semantica hace pensar en una actitud ironica por parte de Chretien, con la que muestra el deseo de explorar el contradictorio e incluso irracional mundo interior de los caballeros, a la luz de las convenciones sociales y la etica cortesana. Al final, a pesar de los muchos obstaculos, Laudine e Yvain pueden encontrar la felicidad, poniendo en relativa solvencia toda la locura precedente