La invencion del conde de Villamediana, Juan de Tarsis y Peralta, titulada La gloria de Niquea ejemplifica la lectura dramatica que de los libros de caballerias se hizo en las decadas siguientes al exito del genero. La teatralidad caballeresca se refleja en esta obra inspirada en el encantamiento llamado “Gloria de Niquea” del Amadis de Grecia (1530) de Feliciano de Silva. Representado el 15 de mayo de 1622 en los jardines de Aranjuez para celebrar el cumpleanos del rey Felipe IV por damas de la corte como intermedio a El velloncino de oro de Lope de Vega, la comedia de Villamediana supuso la caida en desgracia del conde por un incendio producido durante la representacion, intencionado segun la maledicencia para sacar en brazos a la reina, Isabel de Borbon, de la que estaba enamorado. Sea por el incendio provocado, por su enemistad con el Conde-Duque de Olivares o por su presunta homosexualidad, lo cierto es que poco tiempo despues de la representacion, el 21 de agosto de 1622, el conde fue asesinado en plena calle. Sin embargo, la atribucion del texto a Juan de Tarsis no queda del todo clara, por lo que la critica, a partir del analisis de su estilo, sintesis del petrarquismo y del gongorismo, presenta como viable la hipotesis de que Gongora podria ser su autor