Hasta mediados del siglo XX la critica literaria portuguesa ha orientado el estudio de la Cronica do Imperador Clarimundo, de Joao de Barros, casi exclusivamente hacia una interpretacion en clave politica, donde el autor se habria propuesto desde el inicio exaltar la monarquia portuguesa mediante un discurso de legitimacion basado en tres estrategias muy definidas: la primera, de caracter apologetica, consistente en la reivindicacion de la historia de Portugal con el fin de afirmar la situacion politica del momento, en especial la de la expansion maritima; la segunda, centrada en su vertiente mas didactica y pedagogica, con un marcado sentido politico, como es la creacion de un modelo ejemplar personificado en el heroe caballeresco Clarimundo, que se proyectaria de este modo sobre los reyes lusitanos contemporaneos del autor; y una tercera estrategia de legitimacion que tiene como objetivo la elaboracion de una genealogia que vincula al protagonista con la familia real portuguesa, en particular en los dos ultimos capitulos de la obra, en donde Sancho, el primogenito de Clarimundo y Clarinda, casa con la heredera del trono espanol, garantizando asi una transicion hacia la historia real de la monarquia lusa. Sin embargo, en cuanto a este tercer aspecto, se pone de relieve el hecho de que la edicion tradicionalmente manejada por los estudiosos, la de 1742, contenia un pastiche ajeno al autor, en el que ni el titulo del penultimo capitulo, ni su final, ni el ultimo capitulo entero correspondian a la version original, anadidos que, por tanto, no aparecian en la primera impresion de 1522, cuyo final permanecia abierto y sin que la novela desarrollase vinculo alguno con Portugal. Para terminar, el autor propone dejar al margen la vision unilateral del caracter legitimador del texto reflejada en los manuales de historia de la literatura, y analizar la obra de Barros desde el punto de vista de la literatura de entretenimiento, en la misma linea que otros libros de caballerias de la epoca
Lugar de publicacion original: Lisboa