Se analiza la utilidad de la heraldica en el grabado del siglo XVI, haciendo un recorrido general por los antecedentes de esta disciplina en territorio peninsular. Los emblemas heraldicos aparecen en torno a la segunda mitad del siglo XII pero no se generalizan hasta el siglo XIII; surgen limitados al ambito guerrero y militar y desde aqui se transmiten a la sociedad civil. El epicentro esta en la Castilla de Alfonso X, donde se extienden socialmente a las clases bajas y sectores marginales. En este contexto la adopcion de los emblemas, que acabaran funcionando como mecanismos para representar a las personas, diferenciarlas e identificarlas, era completamente caprichosa. Estos mismos ingredientes contienen las claves de las portadas, disenadas atendiendo a la condicion social y a la propia personalidad del mecenas de la obra (p. e., en la Chronica del Famoso Cavallero Cid Ruy Diez figuran las armas de los Reyes Catolicos con el aguila de San Juan acolada al escudo a modo de divisa). El trabajo se continua en Cacheda Barreiro, Rosa Margarita (2005), "La heraldica en el grabado del siglo XVI. Un analisis iconografico (fin)", Hidalguia. La Revista de heraldica, nobleza y armas, 312, pp. 633-648