Vargas Dias-Toledo describe las fiestas que se celebraron el 17 de junio de 1541 en Chatellerault (Francia) con motivo de la boda de Jeanne d’Albret, princesa de Navarra, y Guillaume de la Marck, duque de Cleves, a partir del testimonio por carta de Francisco de Moraes, autor del Palmeirim de Inglaterra. La fiesta consistio en la defensa de cuatro pasos de armas, cada uno con un padron pintado con los colores escogidos por los caballeros y un escudo, ubicados estrategicamente en las afueras de la villa en mitad de una floresta. El Delfin (en el “Vale dos Descontentos Amadores”), el duque de Orleans (en el “Vale dos Contentes Amadores”), el duque de Nevers y el conde de Aumale fueron los encargados de defender los pasos. Doncellas observando las hazanas, otras clamando venganza por agravios, ermitanos consejeros que curaban las heridas, y otros hechos propios de una narracion caballeresca dan muestra de hasta que punto una obra como el Amadis de Gaula, traducida y adaptada por Herberay des Essarts en 1540 que lo convirtio en un autentico manual de cortesania, tuvieran influencia en estos festejos. Vargas senala el episodio de la defensa del Valle de los Pinos de Angriote de Estravaus para conseguir la mano de Grovenesa (cap. 18, Primera Parte) y la aventura del Arco de los Leales Amadores y la Camara Defendida en los primeros capitulos de la Segunda Parte como posible base de las fiestas: “los pasos de armas, los padrones, las letras amenazantes escritas a su alrededor, los mantenedores, los aventureros, los arcos de triunfo, los escudos colgados en los arboles a modo de desafio, las damas contemplando el espectaculo, las doncellas enamoradas, las batallas, los torneos, las encrucijadas de caminos, los lugares encantados, la presencia de ermitanos consejeros” (p. 831), etc., son ejemplos de esta repercusion
Lugar de publicacion original: Alcala de Henares