La aficion por la materia caballeresca alcanza el genero teatral a principios del siglo XVII con ejemplos como El Caballero del Febo, Florisel de Niquea o Palmerin de Olivia de Juan Perez de Montalban. En esta ocasion, Dematte centra su atencion en Las aventuras de Grecia, pieza burlesca basada en el Florisel de Niquea de Montalban, que sigue casi literalmente el hipotexto “noble” del autor. La autora realiza una sintesis del argumento de esta obra que se divide en tres jornadas, y se detiene en el contenido onomastico, claramente parodico, con el analisis de nombres como Almodrote, Cencerro, Quiricalda, Urgada, Cascabel o Sabanon. En consonancia con lo humoristico de los nombres, se encuentra el tono burlesco y los juegos de palabras con referencias sexuales que contiene la pieza, asi como el empleo del lenguaje del gracioso en boca de los personajes nobles. Las aventuras de Grecia es una comedia de enredo, de cruce de amores, en clave burlesca, que elimina el posible final tragico al que apuntaba la obra de Montalban
Lugar de publicacion original: Alcala de Henares