Se cuestiona el «insubornable» realismo atribuido al Tirant analizando los espacios insulares en los capitulos CDX-CDXIII, protagonizados por el caballero Espercius en la isla del Lago, y donde que hay una concesion a la fantasia. Entre las distintas interpretaciones, se propone la copia del Voyage d’outre mer de Mandeville, pero sub specie caricatura, ironia, escarnio e inversion de un motivo etnopoetico: “Una princesa que espera marit, unes illes que esperen senyor, un tresor que espera propietari: tot a canvi d’una gallardia minima.” (p. 29). A la luz de estas claves, el episodio no disuena con la intencion de Martorell -mostrar la decadencia de una institucion- sino que la confirma: “sublima per les vies de la ficcio l’adversitat de la realitat.” (p. 35). Una vez establecidas estas directrices, Martorell acude a los recursos convencionales de los relatos tradicionales: un final feliz con casamiento y ascenso al trono protagonizado por un personaje encantado en animal (ATU 425A, 425C y 433B). Con estas claves la maravilla “No es, pero, un espai gratuit, accessori, prescindible.” (p. 36). Si desea consultar la version electronica de este trabajo, pulse aqui
Lugar de publicacion original: Dolianova