Ficha del recurso
Título
Carlos Maynes
Autoría
Fecha
Finales del s. XII-principios del s. XIII
Descripción

Fecha de traduccion: principios s. XIV

Testimonios manuscritos: Se conserva en un unico testimonio manuscrito inserto en el codice miscelaneo conocido como Libro de los huespedes: Madrid. BME, ms. h-I-13, fols. 124b-152a

Ocho testimonios impresos: 1) Toledo: Pedro Hagenbach, ca. 1499 - 1500; 2) Toledo: s.i. , 1521; 3) Sevilla: Juan Cromberger, 1532; 4) Burgos: Juan de Junta, 1550; 5) Burgos: Juan de Junta, 1550; 6) Burgos: Juan de Junta, 1553; 7) Burgos: Felipe de Junta, ca. 1561; 8) Toledo: Pedro Lopez de Haro, 1584;

Reescritura: De un cantar de gesta frances al manuscrito escurialense: primera codificacion editorialLos origenes de esta obra deben situarse en el cantar de gesta frances la Chanson de la reine Sebille, datado de finales del siglo XII o principios del siglo XIII, y del que apenas se han conservado tres fragmentos muy incompletos. De este cantar de gesta derivaria la prosificacion castellana manuscrita y conservada en el codice escurialense h-I-13 (Baranda 2002: 236). Para Francisco Rico, “Entre el codice y el libro”, en Libro del caballero Zifar. Codice de Paris, Francisco Rico (dir.), Barcelona, Moleiro, 1996, pp. 245-258, p. 257, la uniformidad linguistica que presenta con rasgos occidentales o leoneses y la referencia a una traduccion del gallego que se hace en Una sancta emperatris harian suponer que se traslada de esta lengua o se castellaniza del leones un codice perdido del siglo XIV, aunque otras voces abogan por la existencia de un cantar castellano actualmente perdido sobre el tema de la reina Sebilla, vid. Jose Ignacio Chicoy-Daban, A Study of the Spanish ‘Queen Sebilla’ and Related Themes in European Medieval and Renaissance Period, Diss., University of Toronto, 1974.En cuanto a la posible recepcion del texto manuscrito, es necesario destacar dos aspectos: la titulacion y el conjunto de textos con los que comparte espacio en el codice miscelaneo. En relacion con el primero, en la traduccion y prosificacion del texto se ha producido un cambio en el que toma protagonismo Carlos Maynes frente a la reina Sebilla (“Aqui comjenca un noble cuento del enperador carlos maynes”). Este pretenderia centrar la atencion en Carlomagno y su corte y en su entramado politico-moral, abandonando el tema de la reina calumniada, representado por Sebilla, de origen folclorico y una amplia difusion (Baranda 2002: 236). Esto se entenderia dentro del pensamiento molinista del siglo XIV donde lo trascendente era la corte de Carlomagno y la posicion que este desempenaba dentro del entramado politico-moral. A esto contribuirian tambien, dentro de esta misma corriente cultural, las dos intenciones tematicas de la obra: la necesidad de avisar contra los malos consejeros y privados y “el recto uso al que debe someterse la fuerza caballeresca, prestando auxilio a los representantes mas desvalidos de la nobleza” (Gomez Redondo 1999: 1605-1606).El manuscrito de Carlos Maynes se ha conservado en un codice miscelaneo que agrupa los siguientes titulos, ocupando esta obra la ultima posicion: Vida de santa Maria Magdalena, Vida de santa Marta, Vida de santa Maria Egipciaca, Vida de santa Catalina, el Cavallero Placidas, la Estoria del rey Guilleme, Otas de Roma y el Muy fermoso cuento de una sancta emperatris, que en total pueden resumirse en cuatro relatos protagonizados por santas, dos textos en los que se resalta la capacidad de sufrimiento de hombres y familias que superan los avatares de su destino y tres obras de reinas difamadas, por ese orden, vid. Juan Manuel Cacho Blecua, “El cuento del emperador Carlos Maines y el exemplum del mejor amigo de Merlin (tipo 921B)” en Tipologia de las formas narrativas breves romanicas medievales (III), Maria Jesus Lacarra y Juan Manuel Cacho Blecua (coords.), Zaragoza/Granada, Prensas de la Universidad de Zaragoza/Prensas de la Universidad de Granada, pp. 11-142, p. 115.La union tematica del codice es bastante clara, donde la presentacion de mujeres santas o reinas falsamente acusadas que finalmente recobran su posicion inicial es mayoritaria. No obstante, la presentacion del relato como “cuento maravilloso” podria suponer la culminacion de un proceso de adaptacion del texto a un nuevo publico receptor hispano, para el que se han eliminado nombres considerados como desconocidos, y entranaria, ademas, la transicion a lo que puede denominarse como romance espanol y al inicio del modelo de aventuras caballerescas. Todo ello sin salirse del molinismo y la importancia concedida a las figuras no nobles o antinobles del relato dentro del discurso de ideologia pro-monarquica y anti-linajistica (Heusch 2016).Segunda codificacion editorial: la trayectoria impresa quinientistaEl textoEl cotejo realizado por Baranda (1999) a partir de las ediciones de Toledo (ca. 1500-1501), Sevilla (1532) y Burgos (1551) muestra que la tradicion impresa deriva de un arquetipo comun al texto manuscrito, pero separada de este por agruparse bajo un mismo subarquetipo que ha incluido novedades, entre las mas destacables algunas omisiones con graves errores de transmision, adiciones, modernizacion linguistica e intervenciones deliberadas para adecuar el texto a los nuevos lectores: introduccion del discurso directo, pasajes con mas dramatismo, resumen de detalles geograficos y de personajes secundarios y una delimitacion rudimentaria en la parte final de la obra en bloques que podrian corresponder con capitulos con una pequena rubrica. El objetivo que se perseguiria seria hacer el texto mas evidente intensificando lo maravilloso (vid. tambien Chicoy-Dagan 1982).El conjunto de impresos conservados muestra a su vez el proceso de transicion del manuscrito al impreso. El impreso toledano presenta un texto defectuoso que se ha achacado con el estado del manuscrito base no conservado, con la impericia del componedor o con la union de ambos, ya que resulta ininteligible y el texto aparece fragmentado en 46 divisiones textuales, muy irregularmente distribuidas e introducidas por calderones, y que recuerdan al codice escurialense, y sin ninguna fragmentacion en capitulos. Podria considerarse, no como un impreso, sino como la copia por medios mecanicos de un manuscrito. A partir de la edicion cromberguiana de 1532, aunque por lo consignado por Hernando Colon tambien debe presuponerse como propio de la edicion toledana de 1521, la materia narrativa esta estructurada en 29 capitulos con sus correspondientes rubricas explicativas. Esta edicion constituye el inicio de una nueva rama de transmision con respecto a Toledo (ca. 1500-1501) que introduce de nuevo cambios textuales: sustitucion de terminos anticuados, mayor correccion y supresion de las marcas de oralidad que apelaban al lector, propias precisamente de un cuento (la supresion mas evidente la inicial: “Senores agora escuchad...”), concediendole mayor dinamismo textual (Baranda 1999).El tituloLa tradicion impresa de la obra presenta dos novedades con respecto al testimonio manuscrito: el apelativo “historia” de forma sistematica y generalizada, y la sustitucion de Carlos Maynes por la reina Sebilla.En relacion con la primera novedad, en el interior del Libro de los huespedes el texto aparecia presentado en el incipit como cuento (“Aqui comienca un noble cuento del emperador Carlos Maynes de Roma, y de la buena emperatriz Sevilla, su muger”). Esta categoria no era de nueva formacion, sino que se trataba de un genero ya constituido durante el periodo medieval caracterizado por la brevedad, y por la funcion utilitaria y moral que facilito su transmision en el seno de diversas colecciones o al servicio de un marco narrativo mayor. En lo que concierne al Carlos Maynes, la extension sobrepasa con creces los limites de extension propuestos por un cuento, pero mantiene el caracter utilitario y moral que le pudo valer esta adscripcion generica compartida con el Rey Guillermo, las Otas de Roma y la Santa emperatriz presentes en el mismo codice. Con la llegada de la imprenta, esta impuso los codigos de su propia titulacion para aquellos “cuentos” ofrecidos aislados, segun los cuales el sustantivo “historia”, que se habia modificado terminologicamente a lo largo del periodo medieval para constituirse como sinonimo de narracion, se ofrecia, no solo mas adecuado, sino identificativo del genero editorial de la narrativa caballeresca breve al que se adscribe esta obra. Vid. Victor Infantes, “Tipologias de la enunciacion literaria en la prosa aurea. Seis titulos (y algunos mas) en busca de un genero: obra, libro, tratado, cronica, historia, cuento, etc. (IV)”, en Actas del XIII Congreso de la Asociacion Internacional de Hispanistas: Madrid 6-11 de julio de 1998, coord. Florencio Sevilla Arroyo y Carlos Alvar Ezquerra, Madrid, Castalia, 3, 2000, pp. 641-654 y “Tipologias de la enunciacion literaria de la prosa aurea: seis titulos (y algunos mas) en busca de un genero: obra, libro, tratado, cronica, historia, cuento, etc...(VI)”, en Memoria de la palabra: actas del VI Congreso de la Asociacion Internacional Siglo de Oro. Burgos-La Rioja 15-19 de julio 2002, eds. Francisco Dominguez Matito y Maria Luisa Lobato Lopez, Iberoamericana, Vervuert, Fundacion San Millan de la Cogolla, 2, 2004, pp. 1059-1071; Fernando Gomez Redondo, “Historiografia medieval: constantes evolutivas de un genero”, Anuario de estudios medievales, 19 (1989), pp. 3-16.Por otro lado, la anteposicion de la protagonista femenina en el titulo supone recuperar de nuevo la esencia del cantar de gesta, donde la Reina Sebilla se erigia como figura central del relato. La tradicion impresa rescata su protagonismo en un posible intento por establecer similitudes con otros textos de este genero editorial o afines con presencia femenina en la titulacion (La doncella Teodor, La Poncella de Francia, La linda Melusina o La linda Magalona en su difusion quinientista), o simplemente por plantear un distanciamiento con la Historia de Carlomagno y los doce pares de Francia, de trayectoria impresa paralela.La transicion de un cambio de titulacion a otro se habria producido en un testimonio intermedio entre la princeps toledana, que todavia identifica el relato como "cuento" y la edicion sevillana de 1532, aunque, segun los datos proporcionados por el Regestrum, es probable que el nuevo titulo ya constara en la toledana de 1521.Los grabadosSi presuponemos que el grabado de la edicion sevillana de 1532 fue creado ex profeso para la obra, la Historia de la reina Sebilla habria contado con una tradicion iconografica especifica mantenida en la imprenta hasta esta edicion, posiblemente heredada de epoca incunable, donde los grabados mantenian un vinculo iconografico fuerte con el texto al que acompanaban con funcion utilitaria e informativa para los lectores, y como un apoyo visual que permitiese el ejercicio mnemotecnico. La fragmentacion del grabado de esta edicion demuestra un uso continuado, por lo que es necesario pensar en la existencia de ediciones anteriores no conservadas del taller cromberguiano, o incluso del perteneciente a Ungut y Polono.La correlacion texto-imagen va a perderse progresivamente en posteriores ediciones dentro de la transmision impresa quinientista de la obra. Las ediciones burgalesas de 1551 y ca. 1562 muestran una escena cortesana que bien podria querer resaltar la corte de Carlomagno, espacio en torno al que gira buena parte del hilo argumental de la obra. Ademas de la reutilizacion de un grabado que pudo haber formado parte de un programa iconografico especifico de una obra localizada en el taller de Fadrique de Basilea (ver el apartado “grabados” de estas ediciones), su reaparicion en romances con protagonistas nobiliarios o figuras femeninas regias muestra en la conciencia de Rodrigo de la Torre, segundo regente que dirigio el taller burgales tras la marcha de Juan de Junta a Salamanca, y quien habria tomado las decisiones editoriales de las ediciones de 1551, una similitud tematica entre estas composiciones versificadas y la obrita en prosa de la Reina Sebilla. Este vinculo iconografico-editorial fue recogido por Felipe de Junta, quien echo la vista atras a sus predecesores en el taller burgales a la hora de escoger las xilografias que iban a adornar sus obras de narrativa caballeresca breve.Es particular la edicion burgalesa del 4 de febrero 1553, que parece romper con la linea seguida, tanto por las dos ediciones anteriores, como por la juntina posterior. Para entender su singularidad, es necesario conocer el contexto en el que tiene lugar su impresion. El diciembre de 1552 se habia roto la sociedad entre Juan de Junta y Alejandro Canova, algo que influyo en el taller burgales, regentado por de la Torre. Isabel de Basilea busco el apoyo de Matias Gast, su futuro yerno, quien otorgaria un contrato de cesion de la imprenta burgalesa el 15 de febrero de 1553 a Alonso de Medina. Este periodo inicial de seis meses fue convulso, y el ritmo de produccion del taller no se recuperaria hasta 1554 de la mano de este regente, el que mas ediciones saco a la luz de narrativa caballeresca breve (Fernandez Valladares. Burgos, I: 167-169). Debe presuponerse que la edicion de 1553 no se debio a Rodrigo de la Torre, puesto que resultaria anomalo que hubiese roto la continuidad iconografica de sus ediciones. Tampoco es descartable que, pese a que el contrato de cesion con Alonso de Medina se firmase el 14 de febrero, este hubiese realizado alguna impresion previa en el taller a principios de mes, puesto que la reutilizacion de un grabado del programa iconografico del Libro del Anticristo solo se notifica, ademas de en la Reina Sebilla, en el interior de la edicion de este regente de los Siete sabios de Roma. La composicion de la escena esta xilografia podria guardar cierta relacion con los fragmentos textuales del inicio donde el rey Carlos Maynes recibe a sus caballeros, pero siempre resultaria extrano el demonio que acompana al Anticristo, elemento disidente en la composicion.La edicion toledana de Lopez de Haro (1585) supone una perdida total de cualquier vinculo iconografico posible, puesto que la composicion de la escena celestinesca no ofrece ningun referente que pueda asociarse con un personaje concreto del contenido narrativo, mas alla de mostrar una composicion puramente referencial. A finales del siglo XVI era ya poco frecuente mostrar una xilografia como adorno de portada y Lopez de Haro, con un taller de reducida capacidad impresora, habria querido potenciar esta obra de ficcion ofreciendosela a los lectores como afin a la Tragicomedia, iconograficamente bien identificada por estos a raiz de su continua reedicion en el Quinientos.La adscripcion editorial en el QuinientosGenericamente, la Historia de la reina Sebilla pertenece al «genero editorial» de la narrativa caballeresca breve definido por Infantes, terminologia que pretende agrupar un conjunto de 20 textos separados por disparidades literarias, pero unidos por factores editoriales que han conducido a cambios textuales solo explicables por la intervencion de agentes externos pertenecientes al mundo de la imprenta, vid. Victor Infantes, «El genero editorial de la narrativa caballeresca breve», Voz y letra. Revista de literatura, vol. 7, n.º 2 (1996), pp. 127-132, p. 130. La retorica comun que los conserva unidos proviene de su pertenencia a un repertorio editorial que se mantiene vivo por la existencia de unos lectores que lo justifican. Los nexos comunes, donde encajan perfectamente las caracteristicas de la Reina Sebilla impresa, son el abundante numero de ediciones en este siglo, un origen medieval comun a partir de traducciones de textos pertenecientes prioritariamente a territorio frances, brevedad de impresion, un formato unitario en cuarto y el membrete «historia» casi generalizado en la titulacion. Si se atiende a lo textual, la Reina Sebilla, al igual que los restantes titulos del corpus, tambien se codifica entre 1490 y 1530, fechas en las que podemos situar tanto la princeps de Hagenbach como la edicion cromberguiana, y somete al texto a un proceso de amplificatio, abbreviatio y adaptacion. Desde una perspectiva narrativa, compartiria tambien con el genero editorial la presencia de condicionantes folcloricos populares, en este caso el motivo de la reina difamada, y la justificacion de comportamientos mediante la presencia de elementos religiosos, devotos y morales que propugnan la ejemplaridad y la ensenanza etica, algo que podria ser perceptible en la peregrinatio de la reina y sus intentos por limpiar su imagen mancillada de reina casta, vid. Victor Infantes, «La narracion caballeresca breve», en Evolucion narrativa e ideologica de la literatura caballeresca, ed. Maria Eugenia Lacarra, Bilbao, Servicio Editorial Universidad del Pais Vasco, 1991, pp. 165-182.Muchos pudieron ser los motivos por los que la Historia de la reina Sebilla no continuo su periplo editorial hasta una reescritura en pliegos de cordel mas alla de la edicion vallisoletana de 1623 (vid. el apartado "notas"). Es probable que la Historia del emperador Carlomagno y los doce pares de Francia, dada su mayor fortuna en la imprenta, fuese considerada mucho mas atractiva, donde la figura del propio Carlomagno resultaba mucho mas caballeresca y epica frente a la presentada por Carlos Maynes, en el que el personaje queda manchado por su comportamiento erroneo a la hora de juzgar a su mujer.

Idioma
Frances
Tipo
Texto
Biblioteca