Pese a la gran popularidad alcanzada por la Disciplina clericalis, con sus 85 manuscritos actualmente conservados, la obra nunca fue integramente impresa. Sin embargo, catorce cuentos se integraron en la coleccion de fabulas esopicas preparada por Heinrich Steinhowel, editada por vez primera entre 1476-77 en el taller de Johann Zainer en Ulm, e impresa en castellano en 1482. Gracias a esta obra algunos exempla de Pedro Alfonso ampliaron su contacto con los lectores mucho mas alla del mundo de los manuscritos, y lo mantuvieron hasta epoca moderna. En la ultima seccion de las Fabulas de Esopo (nuestro Isopete), el apartado “Ex Adelfonso” inaugura la serie de catorce ejemplos procedentes de la Disciplina clericalis, pero en un orden diferente al que habitualmente reproducen los manuscritos. La insercion de estos relatos en un nuevo contexto propicia una serie de cambios: 1) para unificar este apartado con el resto, cada uno de los cuentos tiene un titulo; 2) la separacion entre las unidades narrativas y las no narrativas no siempre resulta facil ya que el original es un continuum, lo que supone que a veces se conserven al comienzo de los cuentos restos de los breves consejos que funcionan como un tenue marco dialogado; 3) Steinhowel anade brevisimas frases al comienzo y al final, como sucede en el cuento 15. Por ultimo, se plantea la autora el porque de la presencia de historias protagonizadas por humanos, en una coleccion de fabulas de animales. La explicacion para ello se encuentra en el prologo donde el compilador aleman distingue, de acuerdo con la retorica clasica, entre: historia, fabula y argumentum. Los cuentos de la Disciplina, narraciones ficticias pero verosimiles, entrarian en esta ultima categoria, aunque los traductores no supieron conservar ni adaptar esta terminologia

Lugar de publicacion original: Turnhout