La autora pretende comprobar como se remozaban algunas colecciones de cuentos medievales para atraer la atencion de unos lectores de los ultimos anos del siglo XV y del siglo XVI y lograr asi sobrevivir en el panorama editorial en algunos casos incluso hasta la Edad Moderna. En su recorrido se detiene en el Isopete, el Exemplario contra los enganos y peligros del mundo y los Siete sabios de Roma. De esta ultima obra da aqui a conocer por vez primera un testimonio incunable conservado en Escocia. Estos tres impresos presentan una serie de caracteristicas comunes: llegaron por primera vez al publico lector gracias al taller regentado por Pablo Hurus en Zaragoza, se tradujeron del latin, se adornaron con grabados de las prensas alemanas y en su andadura posterior fueron actualizados en la imprenta sevillana de Cromberger. Conviene recordar que no todas las colecciones de cuentos medievales sobrevivieron gracias a la imprenta ni todas alcanzaron la misma repercusion. Frente a la fortuna que tuvo la materia oriental, con los impresos del Exemplario y de los Siete sabios de Roma, o la antigua, con los Esopetes que tambien incluian sus ingredientes orientales, otras obras nunca llegaron a la imprenta. Las que lo consiguieron fueron aquellas que estaban mas cerca de los gustos lectores, sin romper con la tradicion medieval y fueron actualizadas en los talleres. El grado de manipulacion que sufrieron estos textos a lo largo del siglo XVI fue muy diferente, pero en los tres supuso un hito importante la imprenta sevillana de Cromberger. En el caso del Exemplario, el incunable de Pablo Hurus es modelo reiterado con muy escasos cambios: variabilidad en los proverbios y en su disposicion y deterioro progresivo de las imagenes. La adecuacion del contenido del Esopete realizada en la primera traduccion estaba guiada por principios morales, pero no rompia la unidad del conjunto, mientras que los esfuerzos de los sucesivos impresores por ofrecer un producto nuevo quebro la coherencia formal con sucesivos anadidos, que aportaron poca novedad al conjunto. Por ultimo, los Siete sabios ofrecen un claro ejemplo de variabilidad generica al integrarse en la corriente de la prosa de ficcion, en auge creciente en el panorama editorial de la primera mitad del siglo XVI. En sintesis, los nuevos moldes posibilitan una larga vida para los cuentos medievales, que, gracias a su impresion y reescritura se acomodan a los gustos de los lectores contemporaneos
Lugar de publicacion original: Salamanca