El autor destaca la amplia difusion de los entremeses en el reino de Aragon. En primer lugar estudia la estrecha asociacion del genero con la fiesta del Corpus. En segundo lugar senala como acaban utilizandose como instrumento de propaganda por parte de la monarquia en las ceremonias y banquetes de coronacion, en gran parte tras la llegada al poder de la dinastia Trastamara. Zaragoza ejemplifica esta progresiva asociacion de los entremeses con las entradas reales celebradas a fines de la Edad Media e inicios de la Moderna