Pujol parte del siguiente proposito: “Me dare por satisfecho si, a pesar de mi fundamental impericia, he llevado a vuestro animo al convencimiento de que nuestra cultura pirenaica representa un estrato ejemplar de cultura cristiana” (p. 406). Repasa diferentes inventarios de bibliotecas aragonesas para concluir que la mayoria de textos son doctrinales y religiosos. Habla del Memoria librorum y describe los cinco manuscritos anteriores al ano 1000 que han llegado hasta nuestros dias: el Codex Adrianus, el Miscelaneo patristico, la Biblia Sacra (contiene el texto de la Vulgata), el Beatus in Apocalipsim y el Codex Hispanus (coleccion canonigo-goda de los concilios que se formo en la monarquia visigoda)