Se reivindica la version romantica que de la historia de los Amantes hizo en el siglo XIX Isidoro Villarroya, trabajo que el autor del articulo califica de novela historica. Los cambios argumentales y de estructura quedan justificados por la voluntad ficticia del relato (inestabilidad de la existencia, fatum, abundantes contrastes, tempestades que dilatan el encuentro de los amantes, el misterio, la noche, la muerte, la desesperacion...)