Se analiza la presencia y la deuda que con Virgilio contrajo el poeta latino aragones Antonio Seron. Para ello se estructura el articulo en dos bloques: el primero esta formado por la comparacion en los dos autores del pasaje de la bajada a los infiernos; el segundo coteja descriptivamente algunos versos de Seron con los correspondientes de Virgilio. Se concluye que el bilbilitano tenia un amplio conocimiento de la obra del mantuano. Aunque tomaba todo aquello que mejor se acomodaba a su obra, Seron es consciente de que no hay plagio, por lo que no tiene problemas en citar las fuentes originales con las que construye sus textos