Este trabajo se ocupa de la ingente obra juridica del arzobispo de Tarazona, Antonio Agustin, en la que, como en la filologica, es evidente una evolucion por la que pasa del metodo bartolista tradicional al humanismo juridico, una nueva orientacion introducida por Alciato. Se caracteriza por una nueva manera de entender el legado juridico medieval restituyendo este pasado a su historia. El humanismo es un periodo de renovacion y esta renovacion afecta tambien al derecho. Dentro de este contexto Agustin presenta rasgos que lo individualizan: 1. Alejamiento de la practica y docencia del derecho, por lo cual adopta la postura del erudito puro; 2. Influjo sobre el derecho canonico. Con estos presupuestos se estudian las constituciones griegas del Codex y su edicion del Epitome Novellarum de Juliano. Al margen de la constitucion julianea, se encuentra una obra de Agustin sobre la episcopalis audientia, que modifica la arbitrariedad del codigo anterior y amplia las competencias de los obispos en juicios civiles