La vida de Leonor Lopez de Cordoba estuvo vinculada a Cordoba, aunque su nacimiento se produjo en Aragon, porque sus padres, Martin Lopez de Cordoba y Sancha Carrillo, estuvieron en Calatayud entre 1362-1363, fechas en las que tuvo que nacer Leonor. En esta ocasion Maria Jesus Lacarra edita en un apendice (pp. 211-217) su Testamento, confrontandolo con sus Memorias y a partir de una “copia conservada en la Real Academia de la Historia, acompanado de un estudio preliminar en el que he tratado de relacionar” -dice la autora de este articulo- “algunas de las disposiciones testamentarias con la trayectoria personal de dona Leonor.” (p. 197). Anade que su edicion y comentario no solo puede ayudarnos a comprender mucho mejor a dona Leonor Lopez de Cordoba, a profundizar en sus complejas relaciones familiares y a apreciar el nivel economico que habia conseguido con el paso de los anos, sino tambien a valorar la lucha de una mujer por defender su linaje y recuperar su patrimonio. (p. 197). Mantiene una estrecha relacion con los dominicos -a los que dona dinero para el establecimiento de la capellania y la construccion de la capilla familiar- y con el convento de San Pablo de Cordoba que se ha justificado tradicionalmente por a) sus afanes de grandeza, que le llevan a elegir una orden muy apegada a la corte; y por b) tener alli un supuesto hermano. Teniendo en cuenta sus Memorias, se aclara su razon autentica: parece que aspira a un ideal de sencillez y a un rechazo absoluto de la ostentacion cuando leemos como describe la codicia de los frailes franciscanos, que en las Atarazanas de Sevilla acuden a quitarles los collares de oro a sus cunados despues de enterrados, mientras que, gracias a su novena a Santa Maria “el Amortecida” en el convento de San Pablo, y a su sacrificio de ir durante treinta dias a maitines descalza, consigue abrir la puerta donde habia visto el arco de la Virgen. (p. 199). Ademas, dentro de las mandas testamentarias no solo estaba beneficiar a los dominicos, sino contribuir a las obras de la catedral y ayudar a las ordenes redentoras, la Trinidad y la Merced, tambien conocidas ya como “ordenes acostumbradas (p. 199). Se incluyen descripciones muy exactas de junto a quien queria ser enterrada y de la ubicacion de su sepultura. La organizacion que dona Leonor esboza de los (...) enterramientos revela una concepcion simbolica del espacio, como se refleja en tantas construcciones medievales, bien sea artisticas o literarias. (p. 201). Leonor aprovecha tambien su testamento para a) vincularse a la familia reinante, a pesar de que fue desterrada de la corte acusada de manipular a la reina; para b) demostrar su obsesion por bienes muebles e inmuebles. Por su Testamento sabemos que la intencion de las Memorias, “reivindicar el honor de su linaje y llamar la atencion de la reina dona Catalina de Lancaster”, fue conseguida