Cervantes quiso cumplir con el programa edificante y normativo que la Europa postridentina impuso a la ficcion en sus Novelas ejemplares. Al mismo tiempo, desestabilizo este ultimo programa en la novela que cierra esta obra, El coloquio de los perros, situando la ficcion en un ambito cinico y ludico, un juego ironico "d'une epistemologie sceptique ou l'impossibilite de concluire est une zetetique, un plaisir d'enquete, et une inventivite" (p. 154). Esta ultima novela abre unas posibilidades que tambien estan presentes en el Quijote
Lugar de publicacion original: Paris