Se hace una propuesta de lectura alegorica, de base biblica, en el Libro de Buen Amor que invita a descubrir lo que hay bajo la superficie del texto. Se centra, para ello, en los exempla del texto, donde lo fundamental viene a ser no la letra sino la figura -es decir, entender lo real bajo lo aparente-, lo que supone recurrir a la ambiguedad como recurso lexico y constructivo y para ofrecer una vision de conjunto. De este modo, solo un lector culto puede comprender el verdadero significado del libro. Para demostrar esta hipotesis se comentan los episodios de las serranas, la pelea de don Carnal y dona Cuaresma -donde se fusionan parodia y alegoria-, las aventuras amorosas de dona Endrina y dona Garoza -que contienen abundantes fabulas cuyo significado alegorico sexual se aplica a la comprension del texto y a la busqueda del ‘buen amor’ tras haber probado el loco amor- y la prision del Arcipreste
Lugar de publicacion original: Valladolid