El rastreo del concepto medieval de verguenza del Bonium a don Juan Manuel lleva a relacionarla con la sabiduria y el pecado, a partir del cual se comparan sus fundamentos religiosos como medio para el conocimiento de uno mismo en el cuento L de El conde Lucanor y en el Zifar. El resultado del cotejo es que “en el primer caso, el sentimiento refrenante ha sido obtenido al final del proceso, mientras que en el segundo corresponde a su punto de partida. En ambos tiene un componente externo evidente y se ha planteado en relacion con obligaciones personales y sociales, pero su plasmacion narrativa nos permite vislumbrar como dos escritores medievales espanoles del XIV supieron indagar en los recovecos de sus personajes literarios para expresar unos conflictos tambien interiores relacionados con la verguenza, que no podriamos entender bien sin toda una tradicion anterior. Significativamente en ambos confluye tanto una rica tradicion literaria gnomica como una influyente herencia religiosa, a la vez que los dos pretenden aunar en sus relatos la adquisicion de una honra y la salvacion del alma” (pp. 97-98)