Tras una presentacion de la obra, se centra en el estudio de tres cuentos que pueden considerarse el ejemplo mas temprano de cuento maravilloso en Espana: Nomina, Fons y Striges. La autora trata de iluminar las incoherencias de su trama argumental con ayuda de algunas versiones orientales y concluye que en el texto castellano se subraya el poder maligno de los personajes femeninos, frente al cual los hombres solo tienen dos instrumentos: la oracion o el engano. Nomina, incomprensible en el texto castellano, esta protagonizado en la version persa por un hombre santo y un buen espiritu de la mitologia persa (“un peri”); en la version hebrea, al igual que en la siriaca y en la griega, los dones los entrega un demonio agenerico. La version que mejor ilumina el cuento Fons es la griega, gracias a la cual puede deducirse que muy probablemente el principe habria hecho tambien un pacto con un diablo para intercambiar el sexo durante cuatro meses. El personaje pierde su condicion viril y la recupera mediante el engano. La diablesa o diablo de Striges corresponde en una version arabe a un “ghul” o a un diablo asexuado en la version hebrea. La autora quiere destacar la intencion de los cambios del texto castellano que tienden, en su opinion, a subrayar la misoginia del libro asi como a adaptarlo a un contexto cristiano, aunque esto ultimo parece un proceso mecanico. Sugiere tambien que la coleccion pudo tener dos vias de difusion: una escrita y otra oral, en la corte o en la predicacion, en la que se amplificarian las historia (p. 40)