A finales del siglo XIX, la ropa adquiria valores connotativos y se convertia en la expresion de un estatus social, asi como de la vanidad y coqueteria femenina, porque el vestido participaba en la construccion del individuo y en la explicacion de la sociedad. El articulo se ocupa del ropero de las mujeres burguesa de la Restauracion (1875-1914) en textos -dentro de los que incluye algunos cuentos de epoca- y pinturas, en los que pervive una imagen masculina de ver el mundo y de imponer pautas de conducta. El vestido, la ropa de la mujer se aliara con la norma social y moral, con la religion e incluso con la ciencia, para desarrollar dos arquetipos femeninos, dos construcciones masculinas que articularan dos modelos de mujer: la buena, el angel del hogar; y la mala, la pecadora, la descarriada. (p. 89). Si desea consultar la version electronica de este articulo, pulse aqui

Lugar de publicacion original: Madrid