En el teatro espanol del siglo XVIII existen personajes, ambientes y decorados orientales. Este gusto por lo oriental, incluyendo Las mil y una noches, responde a un espiritu de epoca: el diociochismo vuelve su mirada hacia lo oriental por su interes por la Reconquista. Esta voluntad de rigor historico implica una particular lectura de los textos, siempre sesgada e interesada, que deja de lado el atractivo exotico. Paralelamente a esta recepcion ideologica, existe otra mas estetica, en la que Oriente (el Proximo, el Lejano y Oriente Medio) es un espacio privilegiado de aventuras, donde el heroe lleva a cabo sus hazanas
Lugar de publicacion original: Paris