El tema de la serpiente desagradecida y, en general, de la serpiente como animal malvado es de origen griego (p. 377). En el mundo fabulistico destacan dos versiones: “El labrador y la serpiente” (H. 62) y “El caminante y la serpiente” (H. 186). Esta fabula se convirtio en el prototipo mismo del tema de que el malo no siente agradecimiento. A partir de aqui se crearon nuevas fabulas y anecdotas que mantenian el sentido original o lo combinaban con otros temas fabulisticos. Rodriguez Adrados estudia distintas versiones medievales del tema, pero se centra en el ejemplo 5 de la Disciplina clericalis (Exemplum de homine et serpente), que deriva muy claramente del tema de H. 62 y H. 186, aunque introduce dos modificaciones en el argumento antiguo: 1. El tema de la naturaleza, que conecta con otras muchas fabulas antiguas; 2. El fabulista medieval restablece el imperio de la justicia: el hombre no muere, la serpiente es castigada. La aparicion de la zorra es elemento antiguo, ya que es muy frecuente que sea este animal quien pronuncie la sentencia final. ¿En que medida es responsable Pedro Alfonso de los cambios? Rodriguez Adrados piensa que “ha habido un modelo derivado bien de Fedro, bien de su fuente griega, emparentado con H. 186” (p. 382). Compara el texto de la Disciplinacon las fabulas de “La mordedura de la vibora” y “El campesino y la serpiente” que conocemos por la tradicion rabinica, que, podemos remontar su origen a los siglos IV y V d. C., aunque manejemos textos muy posteriores. En la fabula de “El campesino y la serpiente” hay tambien un juez, una vaca, quien dice que la serpiente tiene razon; luego el rey David ratifica el veredicto hasta que Salomon la mata con un palo. En resumen, el tema de la serpiente malvada “suministro un esquema dentro del cual los fabulistas medievales ofrecieron variantes diversas” (p. 385)
Lugar de publicacion original: Huelva