La novela Pepita Jimenez de Juan Valera tiene para Oleza en su final claros aires de cuento maravilloso. Fue escrita durante el Sexenio Revolucionario, en 1874, un momento de gran exaltacion politica e intelectual. El genero novelistico estaba en auge, pero en medio de una crisis de los valores dominantes. El articulo analiza esta situacion, que hace de Pepita Jimenez un cuento en medio de la batalla. La concepcion de la novela de Valera se plasma bien en esta obra, que asume los postulados del romanticismo aleman, unidos a las circunstancias especificas de Espana. Asi, se quiere hacer una obra que no solo se cina a los hechos, sino verosimil en lo fantastico, que deleite al lector, tratando con libertad la materia, pero sin llegar en ningun caso a la novela de tesis. Tambien es de gran importancia el influjo de la filosofia en el pensamiento de Valera, y la union de esta con la mistica espanola, que se refleja en la escritura de Pepita Jimenez. Es una sintesis de la tradicion representada por la espiritualidad espanola, especialmente la escritura mistica, y lo moderno de filosofos como Hegel, tan caracteristica de nuestro autor. Por ultimo, se compara esta novela con La regenta de Clarin: sus personajes, la situacion, las circunstancias y hasta el desenlace. Se sostiene que en Pepita Jimenez todas las fuerzas que desencadenaran la tragedia en la obra de Clarin estan anunciadas, contenidas y habilmente evitadas. De alguna manera contiene el germen de La regenta, demostrando como de un cuento puede salir otro cuento
Lugar de publicacion original: Cordoba